La verdadera causa...


La verdadera causa de no estar en paz es que abrigamos algo en contra de alguien. Hay una ausencia básica de perdón en nosotros, así que la solución ha de venir siempre en la forma de algún aspecto del perdón, de alguna unión con alguien. No importa si es en un nivel de conducta o de pensamiento. Recuerden de nuevo, la clave es reconocer que cada problema que creemos tener en el mundo nos indica una falta de perdón.

Es cierto que todas las angustias o problemas no aparentan ser lo que realmente son. Creemos que la angustia proviene de todos los diversos tipos de problemas que creemos tener, pero lo que realmente sucede es que el ego ha lanzado una cortina de humo para que no nos percatemos de que cada angustia que experimentamos procede de la ausencia de perdón o de la creencia de que estamos separados. Podemos entender que la solución a cualquier angustia y a cualquier problema en nuestro mundo -bien sea nuestro mundo personal o el mundo en general- sería unirnos y curarnos a través del perdón.

Kenneth Wapnick