No te preocupes si tus comienzos en esta vida espiritual son pequeños. Todas las cosas buenas tienen comienzos pequeños. El poderoso roble surge a partir de una diminuta bellota. De una pequeñísima semilla brotan las plantas y las flores más hermosas. Por medio de una pequeñísima semilla muchas vidas pueden cambiar. A partir de un pequeño pensamiento de fe y creencia pueden surgir maravilla tras maravilla.
Las cosas pequeñas al crecer se hacen grandes.
Da gracias por todas las cosas pequeñas de la vida, después, y a medida que crecen, te mostrarás agradecido por todas y cada una de ellas, y expresarás tu gratitud con palabras y hechos. Deja que todo lo interior se exprese en el exterior. Recuerda siempre que un corazón agradecido es un corazón abierto, y que Me resulta mucho más fácil obrar en y a través de un corazón abierto.
Da gracias y continua dando gracias por todas las cosas para que pueda trabajar en ti y a través de ti en todo momento y producir Mis prodigios y glorias para que todos puedan verlos.
"La Voz Interior" Eileen Caddy