Todo lo que vive...


Todo lo que vive emite, de alguna manera, su propia secuencia vibratoria, su propia música. Y la misma música cuando retorna produce una acción particular sobre esta materia viviente, ya sea activando o vivificando, ya sea estimulando o inhibiendo las funciones fisiológicas vibratorias existentes. Que tu música vivifique el mundo...que tu música ilumine tu mundo...